La historia de los gaviones tiene diferentes versiones y teorías, pero la más común se remonta al año 3.000 a.C. en Perú, donde se utilizaban bolsas hechas con fibras vegetales, que llenaban de piedras con el fin de revestir muros de contención. Una segunda versión nos traslada hasta el antiguo Egipto donde se usaba como muros de contención par las aguas del río Nilo, creados mediante cestas elaboradas con fibras vegetales que llenaban con piedras.
Históricamente los gaviones han tenido diferentes usos como la contención de aguas o como elementos de protección en los conflictos bélicos. En la actualidad, los usos de los gaviones son variados, pero principalmente se usan para decoración (sobre todo en jardines, interiores o terrazas y tienen diferentes opciones como convertirlos en bancos, macetas, pozos, etc.) y construcción civil (utilizados en carreteras, puentes, diques, etc.). Además, también existe la opción de usarlos como protección y absorción de ruidos, en la construcción de fachadas y, principalmente, como muros.
Los gaviones que ofrece BURÉS PROFESIONAL S.A. son estructuras realizadas con mallas electrosoldadas de acero galvanizado de 3,5 mm de diámetro recubierto de una galvanización en caliente de tipo Crapal®4 y luz de malla de 50×50 cm, preparado para contener áridos decorativos y sustratos de plantación BURÉS. Éste último se coloca dentro de una estructura de polipropileno dentro de una jardinera, evitando de esta forma que las raíces sobresalgas y los áridos se ensucien.
Ventajas del uso de gaviones: