El cultivo de la fresa se desarrolla habitualmente con sistemas de regadío y en condiciones protegidas debido a las grandes ventajas que ello comporta. El hecho de aumentar la producción y avanzar la fecha de recolección supone una mejora sustancial en beneficios.
Se trata de un cultivo que debe realizarse en sustratos bien aireados de buen drenaje y sobre todo libres de patógenos. El cultivo en sacos es una alternativa ideal ya que el sistema radicular de carácter fibroso y poco profundo de las fresas se adapta perfectamente.
El sustrato de cultivo en saco para fresa debe reunir las siguientes características físico-químicas:
Todas estas características quedan cubiertas con CULTIVATOR. El cultivo de fresa con CULTIVATOR permite la obtención de producto fuera de temporada y posibilita descentrar la oferta buscando los periodos de mayor beneficio. Al ser un cultivo sin suelo hace innecesaria su desinfección, evitando costes en la producción. En caso de detectar plagas en el cultivo basta con eliminar el saco contaminado pudiendo así evitar un tratamiento con fitosanitarios.
El cultivo de la fresa en CULTIVATOR permite elevar la altura del cultivo en bancadas o mesas facilitando las tareas y la recolección de los frutos evitando que toquen el suelo y obteniendo una mejora en la calidad.
En cuanto a la nutrición el sistema a utilizar debe ser la fertirrigación mediante la cual podremos abastecer de agua y nutrientes a la planta aprovechando al máximo el suministro de NPK y pudiendo escoger el tipo de abonado según el estado de la planta. Todo ello hace de CULTIVATOR la alternativa idónea para el cultivo de la fresa.